Leon Hunter

Refranes y frases hechas del español

refranes españoles

Refranes y dichos populares españoles

Si una cosa está presente en la lengua castellana son los refranes populares y las frases hechas. En nuestro blog habíamos escrito sobre letras perdidas, fake news o incluso el futuro de la lengua española, pero nunca habíamos dedicado un pequeño espacio a lo más cultural y tradicional, como son los refranes y frases hechas populares. En este artículo haremos un compendio (con su explicación) de los principales dichos populares. Alguno será ampliamente conocido, eso seguro, pero no todos. Cuéntanos en los comentarios cuál es tu preferido o cuál te gusta más.

 

Refranes del español

 

El refranero español. Ese enorme abanico tan extendido y famoso tanto en los límites nacionales como internacionales. En el extranjero se han llegado a usar y traducir alguno de los refranes más populares. Por supuestísimo no puede faltar el «de tal palo, tal astilla», normalmente usado para reflejar la similitud entre dos familiares. Igual de famoso es el dicho «dinero llama dinero», el cual indica que la persona adinerada logra seguir siéndolo precisamente por el hecho de ser rico. Por otro lado, dos de los refranes más inmensamente sonados pueden ser «a la tercera va la vencida» o «más vale prevenir que curar». En el primer caso, el significado no es el literal, únicamente indica que no hay que desistir en el intento.

Pero en el segundo no pasa lo mismo, puesto que el refrán indica que ser precavido es una forma inteligente de actuar para evitar un mal mayor en el futuro. Por último, en este párrafo de refranes más “famosos”, hemos querido incluir «no es oro todo lo que reluce». Su significado no es muy buscado y se puede intuir con facilidad, puesto que indica que algo que en apariencia sea bueno puede no serlo al conocerlo más adelante.

Cuando hace mal tiempo inconscientemente intentamos tener una mente positiva para afrontar ese pequeño ataque a nuestras emociones. Esto responde sin duda alguna y sin darnos cuenta al refrán «al mal tiempo, buena cara». Por otro lado, tener amigos está bien porque podemos contarles nuestras penas y buenas noticias. Sin embargo, hay que saber quién es amigo y quién es solo conocido porque nos podría decir «a llorar al valle, majo», lo que indica que le contemos nuestras penas a otro. Sin embargo, esta expresión no es un refrán propiamente dicho, es más bien una expresión coloquial.

Hay un refrán que curiosamente es usado en ambas direcciones en función de la persona. Por un lado, cuando escuchamos «el hábito no hace al monje», entendemos que la forma de vestir no nos define. Pero como decía, algunos la usan al revés, indicando que nuestra vestimenta refleja quiénes somos. Pero que quede claro que esa no es la forma oficial. Hablando en términos cristianos, el refrán «Dios aprieta, pero no ahoga» es un término muy usado en los pueblos, cuyo significado indica que la vida nos pone aprueba, pero siempre con posibilidad de salir adelante. Y ya que estamos, el refrán «a quien madruga Dios le ayuda», indicando que ser trabajadores y en el día a día es lo que nos permite llegar a las metas que nos ponemos.

Ejemplos de refranes con su significado | Educación Primaria

La sociedad actual si se define por algo es por la cantidad de tareas que diariamente realizamos. Ya sea cuidar a los niños, trabajar, cuidar la casa o demás, muchas veces llegamos al fin del día cansados y estresados de tanto ‘trajín’ durante el día. Pues bien, hay un refrán para ello: «quien mucho abarca, poco aprieta», lo que nos quiere decir es que cuantas más tareas hagamos al mismo tiempo, de peor calidad estarán hechas. Estas tareas se acumulan y se acumulan hasta el punto de que aunque sea fuera de plazo, las hacemos. Esto también tiene su refrán: «más vale tarde que nunca», queriéndonos indicar que incluso tarde, es mejor haberlo hecho que no.

Esta última expresión es bastante literal, lo que permite adivinar su significado con facilidad. Sin embargo, el refrán «cría fama y ponte a dormir» significa que si en algún momento hemos actuado de una forma, independientemente del futuro, las personas pensarán que volveremos a actuar de dicha forma.

¿Te suena el dicho «quien avisa no es traidor»? Pues hace referencia a «guerra avisada no mata soldados». Ambas frases se suelen usar en el mismo contexto e indican que si somos avisados con tiempo nunca podemos ser pillados por sorpresa. Completamente alejado de este significado, hay un refrán que sin duda alguna se ha extendido su significado, pero no su frase original. El refrán en cuestión es «¿Dónde va Vicente? Donde va la gente». Este refrán sirve para señalar a aquellos que se dejan influenciar por terceras personas.

 

 

Expresiones coloquiales más usadas en el español 

 

El castellano es un idioma que en muchos aspectos es bastante sencillo -de hecho, es uno de los idiomas que se habla más rápido del mundo-, lo que nos lleva a darnos cuenta de que tanto los refranes como las frases hechas se parecen en la forma en que se estructuran. Sin embargo, hay que saber diferenciarlos, aunque puedan parecer que valdrían para ambas situaciones. Esto no ocurre en otros idiomas, de hecho. Dicho esto, empecemos. Cuando queremos expresar una idea que conocemos, pero que se nos ha olvidado el nombre decimos que tenemos esa idea «en la punta de la lengua». Muy utilizado en el día a día.

Por otro lado, cuando alguien está vacilando o engañando a otra persona se suele decir que le «están tomando el pelo». Aunque en esta situación no se hace de forma ‘directa’, se le halaga. Cuando alguien se «ha quedado con la boca abierta» suele expresar una gran cantidad de asombro. Por otro lado, las personas cuando están excesivamente atareadas y estresadas suelen olvidarse de hacer ciertos recados o quehaceres. A esta situación se le llama «perder la cabeza», puesto que se ha olvidado de un elemento importante. De hecho, gracias a esta expresión se suele decir mucho también «¿Y la cabeza te la has traído?», pero está más enfocado a recalcar lo despistada que es una persona. Sin embargo, esta frase hecha en función de la persona sirve también para expresar que alguien se ha vuelto loco por algún motivo.

Imagina que te acabas de comprar algo caro. Algo excesivamente caro. Para recalcar esa notable diferencia entre lo bueno y lo excelente, se dice que ha costado «un ojo de la cara». Como versión ‘oficial’ esa es la correcta, sin embargo, como buena frase hecha a medida que se usa se diluye la frase, y cada uno le da la interpretación que más guste. Razón por la que también se dice mucho «me ha costado un riñón» para expresar el mismo significado.

Cuando escuchamos la frase «echar una mano o alargar la mano a alguien», interpretamos que alguien se está ofreciendo a ayudar a una segunda persona. De hecho, cuando pedimos ayuda puede ser porque nos hemos equivocado al realizar una tarea o, mejor dicho, cuando hemos «metido la pata». Y ya que hablamos de trabajo, se dice que «hay que ponerse las pilas» cuando queremos expresar que hay que trabajar con más energía de la actual.

Casi seguro que alguno ha quedado con un amigo y este no se ha presentado. A esta situación se le llama «dejar plantado» al haber dejado a una persona sola, en medio de la calle. Puede ser por diversos motivos, pero uno de ellos se le puede atribuir a un mero despiste porque está muy distraída esa persona, lo cual también tiene una expresión para definirlo: «estar en Babia ». Es una frase que se suele confundir con «estar en las nubes» para expresar el mismo significado, sin embargo, esta última significa que alguien está muy lejos o muy alto.

Ya encarando la recta final de este compendio, en las situaciones que tenemos hambre, pero que no es la hora de comer, apaciguamos esas ‘ansias’ con pequeñas porciones de comida. A esa situación la llamamos «matar el gusanillo». Por último, a las personas agradables y simpáticas se las suele definir con una expresión muy propia de los andaluces, pero que toda España entiende a la perfección: «tener salero».

 

¿Qué diferencia hay entre dicho y refrán y cómo se definen?

 

Como hemos visto, el español es un lenguaje cargado de simbolismos y expresiones que sirven para expresar casi cualquier sentimiento (y eso que hemos mencionado solo unos pocos). Sin embargo, hay multitud de locuciones coloquiales que pueden confundirse entre sí a la hora de usarse, pudiendo errar en la forma en la que se usan al confundir refranes con simples expresiones populares. A continuación, vamos a definir brevemente las principales formas que tiene el castellano de expresar locuciones populares o el saber cultural:

 

Refrán «Guerra avisada no mata soldados»

Un refrán es una expresión breve que proviene de la sabiduría popular que tiene un enfoque reflexivo y didáctico a través de una moraleja simple. Lo esencial que define a los refranes es que suelen partir de la experiencia, de tal forma que puedan legitimarse a la hora de brindar consejo, que es el objetivo final de los refranes. Son, por tanto, la mayor expresión cultural de una comunidad.

 

Dicho o frase hecha «Como Pedro por su casa», «a punto de caramelo»

Según la RAE la principal diferencia con el refrán radica en que estas expresiones se han ido usando tanto que, progresivamente, han pasado a formar parte de la cultura popular junto a los refranes. Estos, sin embargo, suelen basarse en moralejas mientras que los dichos populares representan más acciones del día a día de forma simple.

 

Modismo «Irse por las ramas»

 Los modismos son locuciones que normalmente se confunden con los refranes. Sin embargo, como hemos visto, estos tienen una función didáctica y a veces acaban en rima. Los modismos, por otro lado, son expresiones fijas cuyo significado es imposible deducir a raíz de las palabras que la componen. Su objetivo es definir una situación solamente. Wikipedia también lo define como un hábito, una forma de expresar una frase que con el tiempo se ha ido acortando, en aras de ahorrar energía hablando. Por ejemplo, «a troche y moche». En cualquier caso, tanto los refranes como los modismos (como la mayoría de esta sección) sirven para expresar costumbres de una sociedad.

 

Apócopes  del lenguaje coloquial «profe, tele…»

Estas expresiones forman parte del lenguaje cotidiano, sencillo y, a veces, del lenguaje infantil.

 

Pareado

Es una estrofa propia de la poesía que cuenta con tan solo dos versos que riman siempre entre ellos. La rima puede ser consonante o asonante, de arte mayor o menor. Algunos pareados son también refranes.

«En la mesa de San Francisco,

donde comen cuatro comen cinco.»

 

Copla

Por último, la copla es una composición poética de cuatro versos de arte menos con rima asonante en los versos pares. Hay muchas coplas con letras que han pasado a formar parte del lenguaje coloquial, como si de refranes se trataran. Se caracterizan por tener un lenguaje coloquial y directo, y por abordar temas leves, de la vida cotidiana y del amor, aunque también lleguen a echar mano del humor para conseguir efectos cómicos. Se suele estructurar en forma de romance, seguidilla o redondilla. Un ejemplo:

«Él vino en un barco, de nombre extranjero
Lo encontré en el puerto un anochecer
Cuando el blanco faro sobre los veleros
Su beso de plata dejaba caer»

Concha Piquer – Tatuaje